Un estudio publicado por MIT en marzo de este año, demuestra que las personas comparten en redes sociales un 70% más, las noticias que son falsas; adicional a esto, las noticias referentes a empresas, se encuentran dentro del ranking de las 3 favoritas para compartir. El estudio explica también, que las personas prefieren compartir este tipo de noticias ya que son mucho más “novelescas” que las noticias del día a día, lo que pone a las empresas en un estado de vulnerabilidad permanente.
Las fake news se pusieron de moda en su concepto a partir de la campaña presidencial de Donald Trump, caracterizada por la difusión de varias noticias falsas que fueron compartidas en redes sociales con el objetivo de perjudicar las reputación de sus opositores; algunos expertos aseguran que esto formó parte importante del éxito de su campaña.
Sin embargo, el mundo corporativo no ha estado al margen de las noticias falsas, no nos olvidemos cuando en Ecuador se generó un gran ruido al momento que un cliente subió un video en el cual, en una conocida cadena supermercados del país, se limpiaban las perchas para supuestamente “esconder productos y generar especulación”, tras las salvaguardias impuestas por el gobierno de Rafael Correa; esta noticia fue desmentida a través de un video que verificaba el cambio de perchas por remodelación del local.
Las noticas falsas han sido desde siempre mucho más interesantes que las verdaderas; la diferencia lo marca este mundo conectado y la velocidad con la que estas noticias son compartidas por los internautas, lo que facilita que la reputación de cualquiera se pueda destruir en minutos.
Si bien, las fake news no pueden ser controladas por las empresas desde su origen, es importante tener claro cómo se puede fortalecer a una empresa para que estas lleguen a ser más controlables, es por eso que desde Taktikee les compartimos algunos consejos a seguir antes de enfrentar esta crisis:
- Incluir a las fake news dentro del manual de crisis. Sin duda es momento de refrescar el manual de crisis de las empresas, e incluir a las fake news dentro de los potenciales enemigos que pueden generar problemas de reputación, detallando los principales pasos a seguir al momento de enfrentar esta situación.
- Monitoreo online permanentemente. El monitoreo de las redes sociales, blogs y páginas web ya nos son opcionales; la única forma de reaccionar a tiempo ante una posible crisis es enterándose primero de lo que se habla en el mundo online.
- Fortalecer la relación con líderes de opinión e influenciadores. Ellos serán los principales opositores o quienes salgan en defensa al momento en que una noticia negativa ruede por las redes. Si la empresa se ha preparado con tiempo, fortaleciendo su relación con ellos, tiene más de la mitad del camino ganado.
- Reacciona a tiempo, y con reaccionar no queremos decir que siempre haya que decir algo al respecto, pero sí se tiene que valorar a tiempo si la noticia que se está difundiendo merece o no una respuesta de su parte; esta reacción puede determinar el nivel de control que pueda ejercer la empresa sobre una noticia falsa.
- Prepara a los voceros. Muchas empresas cometen el error de exponer a sus voceros más importantes (altos directivos y dueños de las empresas) en plena crisis y sin una preparación previa. El trabajo del relacionista público de la empresa, debe ser el trabajar previamente en fortalecer la imagen positiva y credibilidad de los directivos de las empresas y prepararlos a través de talleres de entrenamiento y simulaciones de situaciones críticas.
